Primer derby toscano de la temporada y primera victoria para la Fiorentina, que ha sabido rehacerse en pocos días del varapalo sufrido entre semana en Champions League con el 0-4 del Arsenal. Con la recuperación de dos jugadoras básicas como Alia Guagni y Alice Parisi, y contra un rival lejos de la calidad de las gunners, la Fiorentina tuvo un partido cómodo desde el principio y el final.

Y es que el reloj no había marcado ni siquiera 8 minutos cuando la española Paloma Lázaro puso por delante a las visitantes. Tras un balón robado en la banda derecha su centro se envenenó hasta terminar en la red. 0-1 y partido ya relajado para las viola. Pocos minutos después, en el 20, la ventaja aumentaba a 0-2 de nuevo gracias a Paloma Lázaro, que remataba deslizándose una de las clásicas internadas por la banda izquierda de Alia Guagni. Con este resultado se llegaba al final de la primera parte con la FSG volcada al ataque y un par de buenas ocasiones, como el palo de Giulia Orlandi poco antes del descanso.

El guión en la segunda parte no cambió: dominio territorial de la Florentia pero a las primeras de cambio De Vanna metió un balón en profundidad para Cordia, que se plantó delante de Schroffenegger y la batió sin problemas. 0-3 y partido acabado… En teoría. Porque apenas cinco minutos después las locales anotaban su primer gol por medio de la central Tamara Dongus, que remataba sin oposición una falta lanzada desde la derecha. El asalto continuaba y ya en el descuento la FSG le metía el miedo en el cuerpo a la Fiorentina con un gran gol de Meagan Kelly desde la frontal del área. Con el 2-3 parecía que habría asalto final, pero pocos segundos después la Fiorentina metió un balón a la espalda de la última jugadora, Dupuy, y De Vanna supo aprovecharse de su dejadez y marcar el 2-4 final.

Tres puntos para las viola, que se colocan segundas y recuperan sensaciones. Mal comienzo en cambio de la Florentia, de la que casi todos nos esperábamos algo más.