La pretemporada está acabando, a la vuelta de la esquina está por un lado la ida de la Champions League y por otro la primera jornada de Serie A, que se disputará íntegra el sábado 14 de septiembre. Los equipos van en busca de certezas y el Milan del nuevo entrenador Maurizio Ganz parece haberla encontrado en un módulo, el 4-1-4-1 que todavía no ha convencido a todo el mundo.

Este es el módulo que ha utilizado el Milan en sus dos primeros partidos “serios” de pretemporada, primero en la abultada derrota por 0-6 contra el Paris Saint Germain y después en la victoria por 3-2 contra el Zurich. La idea, sobre la mesa, es sencilla: defensa de cuatro, un “cinco” delante de la defensa para contener y sacar el balón jugado, un centro del campo muy ofensivo y una punta que fija la defensa adversaria para abrir huecos.

Sin embargo parece que el Milan de Ganz tiene algunos problemas para utilizar esta formación. Como destacaban en el podcast “Il Diavolo Veste Rosa“, el Milan no tiene un “cinco” puro que pueda dar esa salida fácil del balón que necesita el 4-1-4-1. El mercado de fichajes no se ha cerrado todavía, así que hay rumores de que puede llegar una jugadora específica para esta posición.

Hasta ahora ha sido Laura Fusetti la encargada de ocupar este lugar, pero sus características son más las de una defensa central, como ha demostrado tanto en el Milan como en la selección. Sin embargo el equipo rossonero se ha reforzado bastante en esta línea, con las llegadas de Francesca Vitale y Stine Hovland, por lo que no está claro si su uso como centrocampista es premeditado o una forma de Ganz de poner en el campo a sus mejores jugadoras. Quedan menos de tres semanas para el comienzo de la Serie A, así que muy pronto saldremos de dudas.